
“Estoy montando hace un tiempo una compañía de crianza de perros. Ya tengo el ‘‘kennel’’ separado, del grande de la mitad de una calle, donde tendrán área de juegos y jaulas para cada uno de ellos”, dijo de primera instancia el artista que posee unos 16 canes de las razas Pomeranians y Staffordshire.
William Omar Landrón, que se confesó “freak” de esta práctica, explicó que un nutrido de sus animales viven en su residencia de Nueva Jersey con su familia. “Esto fue algo que empecé a hacer calladito hasta que después convencí a todo el mundo en casa”, apuntó. “La verdad es una terapia”, añadió.
El artista, que dijo que su esposa lo apoya en su nueva aventura, destacó que se unirá a una entidad a favor de los animales, en especial los canes en Puerto Rico para que se legalice el cuidado de los perros.
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